Marcos Paz, 9 de junio de 2015
Al Sr. presidente de la Cámara de Diputados
Ing. Agr. Julián Domínguez:
Ante la presentación de la denominada “Ley sobre fitosanitarios” para ser tratada en el recinto de la cámara de diputados el día de mañana 10 de junio, desde la Red de Acción en Plaguicidas y sus Alternativas de América Latina, RAP-AL, llamamos a evitar la presentación y discusión de esta ley y su envío para ser tratada y revisada en la comisión de salud dada la estrecha relación entre la utilización de plaguicidas y su efecto sanitario.
A su vez manifestamos tal como lo tratamos en la audiencia pública que coorganizamos con el equipo de la Diputada Victoria Donda el día 9 de diciembre de 2014 y en la reunión mantenida con el diputado Bazterra y su equipo el día siguiente, la improcedencia y peligrosidad de incluir un artículo que posibilite la importación, distribución y uso de plaguicidas incorporados a los convenios internacionales. La Argentina es signataria de varios convenios internacionales, revalidados por el parlamento nacional, ejemplo de ello son el de Estocolmo sobre contaminantes persistentes, el de Róterdam sobre consentimiento previo en la importación de plaguicidas, el de Montreal sobre bromuro de metilo así como del Código de conducta de la FAO y la Estrategia Internacional sobre manejo de sustancias químicas – SAICM- . En todos ellos se prohíbe o limita la producción, comercialización y utilización de determinados productos químicos, el caso del Endosulfán en Estocolmo o la recomendación de restringir el uso de plaguicidas extremadamente tóxicos realizadas por el código de conducta de la FAO.
Ninguna razón valedera puede retrotraer la autorización para el uso de productos tóxicos con probada incidencia en la salud ambiental. Permitir utilizarlos implica admitir que fallamos en nuestras estrategias de reemplazo o la puesta en práctica de estrategias de manejo integral de insectos de implicancia agrícola o vectores de enfermedades.
En un contexto internacional donde en reuniones de organismos multilaterales – Por ejemplo la FAO- o en la estrategia para el manejo de sustancias químicas – SAICM -, en los cuales participa nuestro país, se recomienda generar un marco en el cual se eliminen progresivamente los plaguicidas extremadamente tóxicos, nos debemos una discusión y sanción de una ley que contemple los avances en las investigaciones sobre el efecto de los plaguicidas en la salud, los logros alcanzados en las comunidades a partir de sus luchas y la existencia de alternativas probadas a los tóxicos, tecnologías de procesos basadas en la integración de los conocimientos científicos y comunitarios.
Necesitamos leyes, un marco normativo, pero no se puede legislar para un país ideal, se deben tener en cuenta las condiciones sociales, económicas, ambientales y culturales en las cuales se realizan las actividades agrarias y se encauza el ciclo de vida de los plaguicidas.
Se debe restringir y detener la utilización de estos tóxicos así como generar políticas que tengan en cuenta las producciones agroecológicas de alimentos sanos a partir de la implementación de estrategias, prácticas y tecnologías apropiadas
Ing. Agr. Javier Souza Casadinho
Coordinador regional RAP-AL.